lunes, 15 de marzo de 2010

anecdota condon con patas y otras

Sobre el poncho barato

Mi primer camino de Santiago, compre todo lo barato que vi que necesitaría en decarton

Poncho de 4 euros azul oscuro con botones donde la mochila, pantalón para la lluvia…
Me llovió los 11 días que patee, el primer día ya me di cuenta de que el poncho era malo, no llegaba ni a la cintura, se mojaba todo bastante y encima entraba agua por los agujeros, pero el tercer día fue el peor, un temporal infernal (viento fuerte, lluvia y niebla) no se veía nada, andabas por la carretera como en medio de la película de silent Hill, además no pasaba ni un coche, el viento hacia que se abrieran más aun los botones y con lo cual entraba más agua, entonces vi a 2 peregrinos belgas que ya había conocido días atrás.



Ellos ya expertos en rutas, llevaban unos ponchos que cubrían hasta las rodillas, totalmente cerrados y vi que entonces no se mojaban, dije quiero uno de esos.
Ya por entonces gracias a dios conocía el truco de la gorra, el cual ha pasado a mis cupidos con el tiempo.
El 2º día me di cuenta de que llevar un pantalón impermeable es más que un error, ya que lo que consigues es sudar tanto la entrepierna que al final acabas con rozaduras.
Sobre el condón con patas
Cuando fuimos a la vía de la plata, las % de que lloviera eras más que 0, pero claro siempre quedan las tormentas de verano que pasan rápido y descargan muy bien.
Ya entonces tenía mi equipo de lluvia el cual aun me dura, sito me hizo caso y se compro otro igual sin dudarlo.



Pero claro José no podía seguir el consejo de la experiencia, y lo pago duramente.
El suponía que se podía marchar sin taparse y mojarse enterito, a riesgo claro de coger una pulmonía, con lo que se compro una funda para la mochila decarton, yo le aconseje el poncho, ya que tapa todo, pero no me hizo caso.


Etapa 21ª: 16 de agosto 2008, llegamos a Zamora y empieza a chispear, José empieza a cojonarse y dice que se comprara un poncho de los chinos, de los que se llevan al parque de atracciones, amarillito pero no llega a usarlo


Etapa 32ª: 27 de agosto, tras toda la mañana de sol en orense en las burgas bañándonos, llegamos al mediodía a cea, tras la merienda/comida salimos hacia castro dozon y empieza a caer una tormenta verano, la cual reaparecerá en algunas etapas hasta Santiago.
José saca el poncho del chino, se lo mete, la mochila no cabe, lo metemos a presión, se raja, está lloviendo, sito y yo parecemos el montaraz y el hobbit, José ya calado, y con la mierda puesta encima, parece un condón con patas.
Esa noche ya pasada la tormenta, se empieza a redimir del craso error de no seguir mis consejos, encima por hacerle caso hicimos mas km.





Etapa 35ª 30 de agosto, tras 3 días lloviendo de vez en cuando, una tormenta ha cubierto el cielo, solo nos quedan 15km hasta Santiago, y la tormenta descarga rayos alrededor nuestra cayendo en el bosque, José pues ya sabéis con el condón puesto, sito y yo, ya hemos ignorado sus quejas, en Santiago me dice que le consiga uno de los míos, gracias a dios con el acabara el camino, ya que la etapa 39ª hasta muxia cayo agua para aburrir.

2 comentarios:

  1. Jaja, realmente es un condon con patas. De todo se aprende :). Yo no tuve dudas al comprar el poncho, es como el tuyo, aunque todavia no lo he estrenado, por no tener pantalones de agua. Pero viendo tu experiencia, prescindiré de tales pantalones :).
    Te añado al blog, me ha gustado mucho, tienes articulos interesantes.

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  2. gracias tharatos
    el pantaon no hace falta con tiempo caluroso, si vas en bañador y con deportivas sino las piernas escurriran todo y te mojaras, por ello en invierno si te recomendaria el uso de pantalon impermeable

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